Cr. Luis Alberto Dalcol, 02/2023
Cuando se proyecta una actividad económica es importante determinar, entre otras cuestiones, cual es la cantidad de unidades que se deben vender o cuáles son los ingresos mínimos que deben obtenerse para que el negocio salve sus costos y no sea perdidoso; y que, partir de allí genere rentabilidad.
La respuesta técnica a esta pregunta la aporta la determinación del punto de equilibrio, es decir el punto de inflexión que marca que por debajo del mismo habrá pérdidas y por encima ganancias.
Determinar esa posición, en cantidad de unidades o en monto de ingreso de pesos, es relativamente sencillo. Solo se necesita conocer tres datos: el precio de venta, el costo de compra (o de reposición) y los gastos fijos.
Supongamos, por ejemplo, que el precio de venta por unidad es de $50, el costo de $ 30 y los gastos fijos son de $ 50.000.
Para determinar cuántas unidades físicas deben venderse, al total de los gastos fijos se los debe dividir por la diferencia entre el precio de venta y el costo del bien.
Es decir que a los 50.000 se los divide por 20 (que es la diferencia entre 50 y 30) y se obtiene 2.500 que es la cantidad mínima de unidades de bienes a vender para igualar los costos totales.
Si se quiere determinar cuál es el mínimo de ventas en unidades monetarias que debe ingresar; al total de los gastos fijos se los divide por el porcentaje de utilidad, sin los gastos fijos.
Para el caso se divide los 50.000 de los gastos fijos por 0,40 que es la utilidad porcentual del 40 % (al dividir 20 (50-30) la utilidad, por 50 que es precio de venta); lo que arroja $ 125.000 (50.000/0.40), que son los ingresos mínimos a partir de los cuales se comenzara a obtener ganancias.
Como prueba que los cálculos son acertados, vemos que las 2.500 unidades a $ 50 nos determinan el ingreso de $ 125.000; y que a su vez los $ 50.000 de los gastos fijos, más los $ 75.000 de gastos variables (2.500 x 30) arrojan el importe total de costos de $ 125.000.
Conocer el punto de equilibrio o también llamado umbral de la rentabilidad es un dato de importancia para planificar un negocio, obviamente que cuando se opera con diversidad de artículos se complejiza su cuantificación; no obstante igualmente se puede alcanzar un número aproximado que orientará al comercio y además podrá determinar la mezcla de ventas óptima o más favorable para la actividad económica.